☰ menú
 



Debió de ser tu tarde…

Debió de ser tu tarde, yo me acuerdo
como las tardes de mi pueblo son.
Si le pongo el oído al corazón l
a siento levantarse en el recuerdo.

Yo me muerdo mi alma y la remuerdo.
Remordimientos mordimientos son,
me sale por la boca el corazón
y de tu tarde, padre, no me acuerdo.

Qué tarde fue que pudo con tu altura,
derribó el pedestal de tu estatura
y te deshizo, desasida en la ola.

Yo cada vez me siento más cobarde
y mientras sufro por tu muerte sola
me duele el sufrimiento de tu tarde.



De: Obra poética completa


PEDRO GARFIAS




regresar