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Soneto a mi padre

Debiera imaginarte fatigado
y te recuerdo siempre vigoroso,
proa hacia el mar y el viento rencoroso
madre detrás, nosotros su cuidado.

Contra tu firme pecho amurallado
se remansaba el tiempo proceloso
y el puntal de tus hombros poderoso
sostenía la tierra lado a lado.

Que viejito estarás... Sobre mis penas
ver tu figura eternamente erguida
a mi rendido corazón asombra.

Siendo tuya la sangre de mis venas
ay, padre mío, ay sombra de mi vida
¿cómo yo nunca pude darte sombra?



De: Antología poética


PEDRO GARFIAS




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