TERESA WILMS MONTT | |
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Anuarí! ¡Anuarí! Espíritu profundo, vuelve del caos. Torna en misteriosa envoltura, huésped de mis noches glaciales. Que tus dedos de sueño posen sobre mis párpados desvelados. Ciérralos, Anuarí. Veneno sublime, da muerte a mi cerebro aterrado. Quédate sobre mi fosa sonriendo enigmático... | |
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Regaló la noche al pantano una estrella. Centro de la esfera fangosa irradiaba el astro en la podredumbre verde, palacio de reptiles. Y en coro alrededor, lotus de veneno surgían sapos inquietando el sosiego de los valles con el croar siniestro. Despertó el águila, y abandonando la roca, voló hacia el plano... |