GONZALO OSSES – VILCHES | |
Al ver pasar a la gente, ¿Nunca te has preguntado quienes son? ¿Por qué luchan, qué sienten, qué hacen? ¿serán protagonistas de historias románticas, serán esclavos de una rutina amarga, serán juguetes del destino o marionetas de Dios? Al ver pasar a la gente, al caminar junto a ella, ... | |
Bastó tan sólo un sí para vivir el ya y el después, bastaron algunos suspiros para crear un hoy. Bastó tan sólo un sí en el momento justo para que muriera el eres. Bastó tan sólo un sí de tus labios para que se olvidara el soy. Bastó tan sólo un sí, un simple sí, un único sí, para que naciera ... | |
Me gustaría decirle al viento que no te quiero, que te he olvidado; me gustaría pedirle al tiempo que me perdone, por mi pasado. Me gustaría cantarle al cielo, abrir las alas y emprender el vuelo; me gustaría escribirte un verso, para que olvides lo que has llorado. Me gustaría, pero no puedo, ... | |
¡Cuánto te odio distancia! Vestida de puta disimulas tu ingenuidad, con tu ligero de olvido alimentas el recuerdo ¡cuánto te odio distancia! La rabia que llevo dentro te la debo a ti ¿contenta? ¡deberías! porque no puedo matarte Te escupo en la cara si miro una foto y entrada la noche ... | |
Las luces se apagan... Valparaíso está oscuro. Los fusiles apuntan hacia la presa de turno, que soy yo, que tuve alma, que amé sin calmas. Las sirenas se encienden, silenciosa esperanza, el domingo se acaba, otro lunes insomne escribiéndole al alba. ¡Siete! El conteo se inicia: ... | |
A mi padre Me encontré de repente, casi sin darme cuenta por el viejo y nunca terminado camino de los recuerdos. Recuerdos que alguna vez fueron pasos en mis zapatos; ilusiones en mi alma, lágrimas en mis ojos. Recuerdos que son sonrisas de niño, esas mismas ... | |
No soy bueno ni malo ni bueno Soy irresponsable, como un niño que al salir se mete el sol en un bolsillo agujereado. De: El Verde que Perdí Selección: Guido Ferrer. | |
No vuelvas, mejor no vuelvas. Si lo haces, me consumirá la pena, arderé de rabia y moriré de celos. Porque yo sé que si tú vuelves, si alguna vez regresas será por mil razones pero no será por mí. Selección: Guido Ferrer | |
Observa como se alejan... volando. Mira como regresan... humillados. Siente el dolor en sus rostros, la palabra que corre por sus venas, escucha su agonía eterna... No los toques; se pueden caer y se rompen no los llores no tiene sentido ellos no mueren Sólo observa como se alejan... ... | |
Sobre las llanuras del cielo atardeciendo cabalgan figuras, como manchas. Un hombre mira hacia el poniente. A sus espaldas la oscuridad avanza. Pero la mirada viaja con la luz y se desprende. El hombre se ha quedado sin los ojos. De: El Verde que Perdí Selección: Guido ... | |
No me mires, con tus verdes ojos gastados, no me llames, con tu boca suave y quebrada, no me extiendas tus tibias manos amantes, ni menos, camines en puntillas por mi mente. Porque entonces si haces eso sé que no soy dios, me siento débil, enfermo, pequeño, y me escondo ... | |
El día que me mate, los trenes llevarán minutos de retraso, el tiempo justo para recoger mi cuerpo de las vías. Y la ciudad se abrirá, desvencijada y pujante, sobre la olvidad trocha de sus tranvías. No sé qué rumor acunó mi amor por sus veredas, pero es como si fuera ayer ... | |
Huelo a muerte en estos días, huelo a olvido, a poema inacabado, a tristeza, a pecado. Huelo a estorbo de recuerdos, a Navidad de niños huérfanos. A polvo puesto, a caras parcas, a espermios muertos. Huelo a negro de conciencias, huelo a entierro, a ciudad contaminada, a estribillo sin solfeos. ... | |
El verde ha sido verde desde mucho antes que tú y yo fuésemos nosotros y de mucho antes que ambos volviésemos a ser extraños. Cuando vivíamos en rojo y soñábamos en azul, ya lo echábamos de menos, cuando me hundí en el negro y te fuiste tras el blanco supimos que nos era ajeno. ... | |
Esta ciudad sin Dios, este amorío, estos versos inspirados por el alcohol, el día que llegué y tu te habías ido, tus compactos y los libros, que dejaste en el cajón. El cruel naufragio de todas mis creencias, los pecados que nunca voy a contar, la redención que entre tus piernas buscaba, ... | |
A ti te gustaba el hecho que yo dijera ser poeta Pensabas que así me tendrías y yo -baboso- te escribiría largos y encendidos versos. Versos que exaltaran tu belleza que hablaran al lector de tus virtudes para que no existieran dudas sobre la grandeza de tu alma y la firmeza de tus besos. ... | |
La noche antes de mi muerte estuve mirando el mar. Lo penetré, sus olas abrazaron mis rodillas vestidas. Aunque era de noche sentí su color, reviví el verde esmeralda del que está hecho. Lo amé, al comprender que era el color de tus ojos expandidos en él, y tuve miedo, me sentí solo, ... | |
Ahora espero acorralar las pocas palabras que me agradan para abrirlas por el medio y descubrir su fondo. Dos de ellas se escondieron en mi viejo diccionario las demás huyeron... pero tengo un libro que las contiene y las pronunciaré hasta quedar dormido. Una vez allí, las repetirá ... | |
Hace una semana te fuiste de Chile hacia otro país, muy al norte de aquí. Yo no sé cuanto tiempo estarás alejado de mí, ni si regresarás, pero para que al volver no te asusten los cambios que ves, te hago un resumen de noticias, donde te cuento un poco de todo, ... | |
Afuera; en las calles hay olvido de vehementes tormentas. Afuera; desde las ramas de un árbol sigue brillando el sol. Afuera; sopla el viento revolviendo las hojas apagadas y el silencio se torna más mudo todavía. Hay un gris que despierta en el aire deshojando mi aliento, ... | |
Cada vez que es otoño yo me quedo en el tiempo y cada hoja que cae, traerá tu recuerdo. ...y aquél viento frío, que penetra mis huesos, y esa fría llovizna, que es mi llanto secreto. Ya mi risa se apaga, y me cuesta creerlo, ya no habrá primavera en mi vida de nuevo. Sólo sé que estoy cierto, ... | |
Tú estarás lejos. Yo dejaré la vida como una pena olvidada que se abandona para proseguir el camino, y emprenderé la muerte. Detrás de mí, siguiéndome, irán todas las cosas queridas,el silencio que nos uniera,el arduo amor que nunca pudo vencer el tiempo,el roce de tus manos, ... | |
Estoy muerto ahora sí ya no soy, ya no siento viviré entre tus instantes seré sólo un pensamiento uno oscuro, uno negro tendré forma de recuerdo Seré algo que no ves, no una carta, no un poema, ni siquiera un sentimiento, ni llanto ni risa ni sombra ni viento. Seré ESO, seré ALGO ... | |
Te propongo algo... te propongo que imagines que llego a tu casa una mañana, una mañana de invierno, una mañana con lluvia. Imagíname de traje, con ese traje azul que te gustaba; con abrigo y con corbata. Imagínate que soy un vendedor, tu me escuchas, tu me atiendes, ... | |
¡Qué me importa la muerte! Ráfaga veloz que rasante te besa. Canción de torrente con veneno en la sangre. Trueno desierto con arenas que dan tu tiempo. Vino traicionero, por incapaz. ¿Qué me importa la muerte? Si total no es mía. Y si lo fuese, da lo mismo, no me quedo con ella. ... | |
Sólo un gesto audaz bastó para revelarme el significado de todo cuanto allí existía. Supe entonces, que una flor bien podía ser todo el jardín. Que la palabra, todas las palabras. Que una mirada, todos los ojos. El universo, una masa oscura. Me brotaron Arrau y Huidobro, ... | |
Si te dijera, Que ha llovido un niño, Que una flor se ha hecho hombre, Que los pájaros son una mancha azul, Que las mañanas crecen de raíz a la sombra de los ríos. Si te dijera: Que la angustia dura más de doce meses, Que todos mis días son martes y trece, ... | |
Quédate, me dijo, y lo toqué. De: El Verde que Perdí Selección: Guido Ferrer. | |
Ahora, atado al mástil de la indecencia, ahogado entre mi semen y mi sangre... Desespero. Después, contando posibilidades imposibles, inventando odiosidades venideras... Agonizo Mañana, sacudiéndome el polvo del camino, arrimándome a la sombra que sofoca, a la línea ... | |
Surgiste de su propia nada a mi presente. En un revuelo de otoños a medio caer. De la flor misma de mi árbol preferido. Del grito que nunca di. Del sueño que siempre tuve y jamás conté. Y tuviste la piel del niño. El canto de una vieja melodía ... Canción de cuna que extraño ... | |
Tu castigo será saber que yo he sufrido Tu castigo será verme sufrir Serás quién, desde la otra orilla, me extienda su mano sobre el abismo Para que yo la rechace y la vuelva a implorar, cuando ya te hayas ido. De: El verde que perdí Selección: Guido Ferrer | |
Ha muerto el hombre que yo fui, te lo prometo, incluso siento pena por él; tan falso, tan cruel, tan bohemio, tan absurdo en su vivir, tan grotesco. Ha muerto hoy, pero es para mejor. Rescatemos de él lo poco que era verdadero; el amor por su trabajo, su falta de dinero, ... | |
Escribe pobre engendro Nerudiano, pero esta noche no escribas los versos más tristes, escribe de una vez las rimas más alegres, pero escríbelas tú ¡No se las copies a Bécquer! Escribe, maldito amante despreciado, escribe algo puro, que no se refleje tu alma, cántale a tu sombra ... |