LUIS PALÉS MATOS | |
Me llaman desde allá larga voz de hoja seca, mano fugaz de nube que en el aire de otoño se dispersa. Por arriba el llamado tira de mí con tenue hilo de estrella, abajo, el agua en tránsito, con sollozo de espuma entre la niebla. Ha tiempo oigo las voces y descubro las señas. ... | |
Por la encendida calle antillana va Tembandumba de la Quimbamba Rumba, macumba, candombe, bámbula entre dos filas de negras caras. Ante ella un congo gongo y maraca ritma una conga bomba que bamba. A paso lento la Reina avanza, y de su inmensa grupa resbalan meneos ... | |
Del transfondo del sueño la escapada Filí-Melé. La fluida cabellera fronda crece, de abejas ejambrada; el tronco desnudez cristalizada- es desnudez en luz tan desnudada que al mirarlo se mira la mirada. Frutos hay, y la vena despertada látele azul y en el azul diluye ... | |
En sombra de sentido de palabras, fantasmas de palabras; en el susto que toma a las palabras cuando con leve, súbita pisada, las roza el halo del fulgor del alma; -rasgo de ala en el agua, ritmo intentado que no logra acorde, abortada emoción cohibida de habla-; en el silencio tan cercano ... | |
En lo fugaz, en lo que ya no existe cuando se piensa, y apenas deja de pensarse cobra existencia; en lo que si se nombra se destruye, catedral de ceniza, árbol de niebla ¿Cómo subir tu rama? ¿Cómo tocar tu puerta? Pienso, Filí-Mélé, que en el buscarte ya te estoy encontrando, ... | |
Ésta es la tierra estéril y madrastra en donde brota el cacto. Salitral blanquecino que atraviesa roto de sed el pájaro; con marismas resecas espaciadas a extensos intervalos, y un cielo fijo, inalterable y mudo, cubriendo todo el ámbito. El sol calienta en las marismas rojas el agua ... |