JOSÉ EMILIO PACHECO | |
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Pero el agua recorre los cristales musgosamente: ignora que se altera lejos del sueño todo lo existente. Y el reposo del fuego es tomar forma con su pleno poder de transformarse. Fuego del aire y soledad del fuego al incendiar el aire que es de fuego Fuego es el mundo ... | |
En el último río de la ciudad, por error o incongruencia fantasmagórica, vi de repente un pez casi muerto. Boqueaba envenenado por el agua inmunda, letal como el aire nuestro. Qué frenesí ek de sus labios redondos, el cero móvil de su boca. Tal vez la nada o la palabra inexpresable, ... | |
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En la madera que se resuelve en chispa y llamarada luego en silencio y humo que se pierde miraste deshacerse con sigiloso estruendo tu vida Y te preguntas si habrá dado calor si conoció alguna de las formas del fuego si llegó a a rder e iluminar con su llama ... | |
Entre tanto guijarro de la orilla no sabe el maren dónde deshacerse ¿Cuándo terminará su infernidad que lo ciñea la tierra enemiga como instrumento de tortura y no lo deja agonizarno le otorga un minuto de reposo? Tigre entre la olarasca de su absoluta impermanencia ... | |
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La silenciosa noche. Aquí en el bosque no distingo rumores, no, de ninguna especie. Los gusanos trabajan. Los pájaros de presa hacen lo suyo (seguramente). Pero no escucho nada. Sólo el silencio que da miedo. Tan raro, tan raro, tan escaso se ha vuelto en este mundo ... | |
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En esta hora fluvial hoy no es ayery aún parece muy lejos la mañana Hay un azoro múltiple extrañezade estar aquí de ser en un ahora tan feroz que ni siquiera tiene fecha ¿Son las últimas horas de este ayer o el instante en que se abreotro mañana? Se me ha perdido el mundo ... | |
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El misterioso día se acaba con las cosas que no devuelve Nunca nadie podrá reconstruir lo que pasó ni siquiera en este más cotidiano de los mansos días Minutoenigma irrepetible Quedará tal vez una sombrauna mancha en la pared vagos vestigios de ceniza en el aire ... | |
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Porque sabe cuánto la quiero y cómo hablo de ella en su ausencia, la nieve vino a despedirme. Pintó de Brueghel los árboles. Hizo dibujo de Hosukai el campo sombrío. Imposible dar gusto a todos. La nieve que para mí es la diosa, la novia, Astarté, Diana, la eterna muchacha, ... | |
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Vuelve a mi boca, sílaba, lenguaje que lo perdido nombra y reconstruye. Vuelve a tocar, palabra, el vasallaje con tu propio fuego te destruye. Regresa, pues, canción, hasta el paraje en donde el tiempo acaba mientras fluye. No hay monte o muro que su paso ataje: lo perdurable, no el instante, ... | |
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Mis paginitas, ángel de mi guarda, fe de las niñeras antiquísimas, no pueden, no hacen peso en la balanza contra el horror tan denso de este mundo. Cuántos desastres ya he sobrevivido, cuántos amigos muertos, cuánto dolor en las noches profundas de la tortura. Y yo qué hago y yo ... | |
De las capitanías de la oruga sabe el rosallo que le corresponde Silenciosas boquitas que roen de nocheo bajo la altanera plenitud del gran sol las perfecciones naturales Ante ellas no hay belleza Sólo avidezsólo la necesidad de estar vivas Y perduran matando como nosotros ... | |
Bajo el mínimo imperio que el ver no ha roído se derrumban los días, la fe, las previsiones. En el último valle la destrucción se sacia en ciudades vencidas que la ceniza afrenta. La lluvia extingue el bosque iluminado por el relámpago. La noche deja su veneno. ... | |
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Me asomé a la ventana y en lugar de jardín hallé la noche enteramente constelada de nieve La nieve hace tangible el silencio y es el desplome de la luz y se apaga La nieve no quiere decir nada: Es sólo una pregunta que deja caer millones de signos de interrogación sobre el mundo ... | |
Y ahora una digresión Consideremos esa variante del amor que nunca puede llamarse amor Son aislados instantes sin futuro En la ciudad donde estaré tres días nos encontramos Hablamos cien palabras Pero un brillo en los ojos un silencio o el roce de las manos que se despiden prende ... | |
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Siempre medita el agua del acuario Piensa en el pez salobre y en su vuelo reptantebreves alas de silencio El entrañado en penetrables líquidos pasadizos de azoque en donce hiende su sentencia de tigre su condena a claridad perpetua o ironía de manantiales muertos tras dormidas ... | |
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