LEOPOLDO MARÍA PANERO | |
| |
Escucha en las noches cómo se rasga la seda y cae sin ruido la taza de té al suelo como una magia tú que sólo palabras dulces tienes para los muertos y un manojo de flores llevas en la mano para esperar a la Muerte que cae de su corcel, herida por un caballero que la apresa ... | |
Fui a cagar en tu cuerpo, por verlo tan desnudo. Hoy es tu alma un despojo, una cosa sabida y el cenicero habla tan sólo por los dos. He sorbido tu espíritu y de él nada queda: tu rostro se parece hoy a nadie, a una persona de ésas sin alma y rostro que vemos por la calle cruzando ... | |
Ah el doble, el doble oscuro del poema sombra de sombras, nada del ayer filo de una navaja sobre el poema que a la vida ensucia y vierte de estiércol el río: y que la nada brille esto es el poema. De:Poemas para un suicidamiento 2001, Madrid | |
Culo contra aculo el único espejo es el culo erupto contra la vida el hombre es un asno de circo El enemigo es el hombre y soypastor del excremento señor único de la nada rey del viento página en que ladra un perro (Selección: Rodrigo Carrillo) | |
Bello es el incesto. Hay torneo de lanzas, y juegos y el vino promete su derrame para alegrar la unión de los esposos. Se decapitará a dos niños para saber si es buena la sangre, y si así augura una feliz unión para los siglos. Cándido, hermoso es el incesto. ... | |
gime el lebrel en el cordón de seda GóngoraComo un perro me ladro a mí mismoy escarbo en los restos de mi alma igual a alguien que quiso sery se convirtió en vapor de sí mismo, en sedarasgada por los lebreles del tiempo (De: Conversación) | |
Cuando cansado desde el lecho, melevanto a mirarte, Juvencio, y otra vezel cansancio reencuentro de nuevo pienso en Cieno que los ojos de semen sin cansarse cegaba; y cuando una vez solo miro vacía la camacomo siempre estuvo recuerdo el látigo aun, con la última ... | |
Más allá de donde aún se esconde la vida, queda un reino, queda cultivar como un rey su agonía, hacer florecer como un reino la sucia flor de la agonía: yo que todo lo prostituí, aún puedo prostituir mi muerte y hacer de mi cadáver el último poema. ... | |
No es tu sexo lo que en tu sexo busco sino ensuciar tu alma: desflorar con todo el barro de la vida lo que aún no ha vivido. De: Unas gotas de semen | |
¿Quién me engaña en la noche, y aúlla pidiéndome que salga, que salga a la calle y camine, y corra, y atraviese las calles como perro rabioso las calles desiertas en que es siempre de noche, bucando locamente el baccarrá en la noche? ¿Quién me despierta, qué hembra mortal o pájaro ... | |
El enemigo es el hombrey soy pastor del excrementoseñor único de la nadarey del viento página en que ladra un perro (De: Conversación, -Nivola- 1a. Edición-febrero 2003- España) | |
| |
Bufón soy y mimo al hombre en esta escalera cerrada con peces muertos en sus peldaños y una sirena ahogada en mi mano que enseño mudo a los viandantes pidiendo como el poeta limosna mano de la asfixia que acaricia tu mano en el umbral que me une al hombre que pasa a la distancia ... | |
Hombre normal que por un momento cruzas tu vida con la del esperpento has de saber que no fue por matar al pelícano sino por nada por lo que yazgo aquí entre otros sepulcros y que a nada sino al azar y a ninguna voluntad sagrada de demonio o de dios debo mi ruina. ... | |
A Inés Alcoba. Si la beauté n 8242;était la mort Toda belleza por el cadáver pasa y se limpia en el río de la muerte, el Ganges que a los inmortales conduce toda mujer se transfigura en la tumba y adorna en el eterno peligro de la nada así, querida sabrás mureindo lo que es el Adorno ... | |
La fiebre se parece a Dios. La locura: la última oración. Largo tiempo he bebido de un extraño cáliz hecho de alcohol y heces y vi en la marea de la copa los peces atrozmente blancos del sueño. y al levantar la copa, digo a Dios, te ofrezco este suplicio y esta hostia nacida de la sangre ... | |
En mi alma podrida atufa el hedor a triunfo la cabalgata de mi cuerpo en ruinas adonde mis manos para mostrar la victoria se agarran al poema y caen y una vieja muestra su culo sonrosado a la victoria pálida del papel en llamas, desnudo, de rodillas, ... | |
A Mercedes, por el hilo que la une al secreto Porque hiciste mi gesto eterno supe que eras la muerte: porque ella sólo podía amarme si no había hombres para mí, vivos: sólo ella podía amarme:y supe también que tú erasla muerte, y que me amabas. ... | |
Hay restos de mi figura y ladra un perro. Me estremece el espejo: la persona, la máscara es ya máscara de nada. Como un yelmo en la noche antigua una armadura sin nadie así es mi yo un andrajo al que viste un nombre. Dime ahora, payo al que llaman España si ha valido la pena destruirme ... | |
quotLe fleurs du mal. Charles Baudelaire Tú que eres tan sólo una herida en la pared y un rasguño en la frente que induce suavemente a la muerte: tú ayudas a los débiles mejor que los cristianos tú vienes de las estrellas y odias esta tierra donde moribundos descalzos se dan la mano ... | |
| |
quotallá estará también la castañera de ocho pares, y el humo de los céntimos, y el vaho en los bolsillos Leopoldo Panero, Escrito a cada instante Pero no sólo los mendigos, padre, van al paraíso van también aquellos que aun más asco dan también estos mendigos del ser que acezan ... | |
La alucinación de una mano, o la esperanza póstuma y absurda en la caridad de la noche | |
A Isa-belle Bonet Una mujer se acercó a mí y en sus ojos vi todos mis amores derruidos y me asombró que alguien amase aún el cadáver, alguien como esa mujer cuyo susurro repetía en la noche el eco de todos mis amores aplastados y me asombró que alguien lamiese ... | |
Qué larga es la ribera de la noche, qué larga es. No hay animales ya ni estrellas y el matorral de los recuerdos la vida es una línea recta,qué larga es la ribera de la noche qué larga es. El mar, al lado, tan oscuro ya ni la luna quiere verme y allá en el pozo sepultada la miel aquella de esos labios ... | |
Decidió pasar el resto de su vida dentro de un tubo de plexiglás. Para ello creyó conveniente hacerse con un burro. A eso del mediodía los dos se encontraron en el mundo del plexiglás. Los habitantes entonaron himnos de bienvenida, hosannas aleluyas. Era de nuevo, ... | |
Jois e jovens n es trichaire e malvestatz es d aquí.Marcabru Una cuchara recorre el jardín húmedo de mi chambre* y circula por entre las botellasvacías: la miro a los ojos y veo tus dos ojos azules, madre mía. Y cantas, cantas, por las noches parecida a la locura, velas con tu maldición ... | |
Y la Madre reprendió al niño, y dijo qué haces que no velas el cadáver y él puso su boca en aquel falo, y sorbió lentamente como de un alimento porque el muerto ese era el incienso que purificaba los sabidos hedores del teatro, su turbia agonía de modo que al crepúsculo ... | |
La vida es un borracho una ebriedad de espanto un lugar en el cieno una ebriedad de lodo que cae de mi boca, formando el poema. (De: Conversación, -Nivola- 1a. Edición-febrero 2003- España) | |
El agujero que ha muerto se despliega como una sábana para no poder dormir -yo, al fondo de él, habiéndome olvidado- mi cadáver será un signo -En la pared sombras de sapos van, una a una, pasando pensando -no poder dejar de pensar -en la pared desfilan lentas las sombras ... | |
Lo que queda después de la flores una cosa sin dientes,recordandoel misterio de la flor, la espantosa aguja para grabar en la piel las sílabasdel dolor: y la vida es como una irritación, o una molestiade ser nada aun, como un recuerdo. (De: Conversación) | |
Era más romántico quizá cuando arañaba la piedra y decía por ejemplo, cantando desde la sombra a las sombras, asombrado de mi propio silencio, por ejemplo: hay que arar el invierno y hay surcos, y hombres en la nieve Hoy las arañas me hacen cálidas señas desde las esquinas ... | |
Vi cuatro mujeres luchando por los senos de un muerto, vi cuatro mujeres luchando solas, más tarde,por la posesión del soplo y disputando con sus uñas feroces por el Abel Garmín que abandonaba feliz aquellos huesos. Hay cuatro mujeres que robaron mi fetidez sensible y mi prodredumbre ... | |
Como la mancha de un insecto grabada sobre la pared así es la vida como un grano o una pústula que la muerte revienta. (De: Conversación, -Nivola- 1a. Edición-febrero 2003- España) | |
Al alcohol Quién grita, vengativo, en el palacio sin nombre, quién grita, quién me fuerza a vivir con su látigo restllando a diario en mi espalda, quién sino esta tentación perpetua al...dolor de la nada, de esta muerte que invita, esta obsesión perpetua de sufrir por nada, ... | |
Quedará lavado y blanco como la nievebesado por todas las vírgenes martirizadasmientras la vieja iglesia queda abajoenvuelta en la vieja niebla de las miasmasThomas Stearns Eliot, El hipopótamo Se cantan himnos a la virgen y loas a la cruz que no existe, y al más allá, ... | |
Amor mío, los árboles son falos que recuerdan al cielo lo que fui, y todos los hombres son monumentos de mi ruina. De qué sirve llorar, en este crepúsculo en que el amor empieza si estás tú frente a mí, como lo que un día fuiste: presagio de mí mismo, no de mi destrución, ... | |
A Pepe Espaliu La herida es una enfermedad de la piel como si sólo lo que hay no bastara para hundirnos y construir la poesía como una enfermedad de la piel. De: Orfebre, 1994 | |
Los hombres del Viet son tan hermosos cuando mueren. El agua del río, lamiendo sus piernas, hacía más sexual su ruina.Luego vinieron las Grandes Lluvias, buscando la vagina hambrienta de la selva, y todo lo borraron. Quedó sólo en los labios la sed de la batalla, para nada, como baba que cae ... | |
Tengo un ojo de cristal en la mano en la mano y el pie que busca mi ano diciéndole a las sombras, suavemente qué terrible es el ojo. (De: Conversación, -Nivola- 1a. Edición-febrero 2003- España) | |
No mataré ya más, porque los hombres sólo son número y letras de mi agenda e intervalos sin habla, descarga de los ojos de vez en vez, cuando el sepulcro se abre perdonando otra vez el pecado de la vida. No mataré ya más las borrosas figuras que esclavas de lo absurdo avanzan ... | |
Un loco tocado de la maldición del cielo canta humillado en una esquina sus canciones hablan de ángeles y cosas que cuestan la vida al ojo humano la vida se pudre a sus pies como una rosa y ya cerca de la tumba, pasa junto a él una Princesa. | |
Y quedadetrás de la nada un jadear tan sólo perseguido por los árboles, perseguido por los bosques que susurran al oído palabras obscenas diciendo no eres hombre, eres menos que un susurro. (De: Conversación, -Nivola- 1a. Edición-febrero 2003- España) |